ORTEGA Y GASSET, JOSÉ
Siempre he creído ver en Mirabeau una cima del tipo humano más opuesto al que yo pertenezco, y pocas cosas nos convienen más que informarnos sobre nuestro contrario. Es la única manera de complementarnos un poco. Nada capaz para la política, presumo en Mirabeau algo muy próximo al arquetipo del político. Así introduce Ortega en su librito Mirabeau o el político, publicado en 1927, el concepto de arquetipo. A renglón seguido afirma: Arquetipo, no ideal. No deberíamos confundir lo uno con lo otro. Tenemos, pues, un concepto: el de arquetipo; un ejemplo: el arquetipo del político; y un caso que se presenta como cima de este arquetipo concreto: el de Mirabeau. Vamos a tratar de aprehender desde un punto de vista filosófico la realidad a que está refiriéndose Ortega.