MALKIEL, YAKOV
Nos hemos acostumbrado a considerar las letras, en sí mismas, como meras apuntaciones gráficas destinadas a un fin práctico; representar la lengua. Sin esa finalidad concreta, las letras aparecerían como elementos aislados, mudos, sin relevancia; a lo más, objetos de estudios o discusiones eruditas. Sin embargo, esa visión de las letras como elementos secundarios de la lengua no deja de ser una visión ingenua. Y así lo demuestra este trabajo clásico de Yakov Malkiel: a su particular manera, las letras no son sólo esos elemetos subalternos de la lengua escrita, sino que ofrecen numerosos ejemplos donde obran como recurso de primer orden en los más diversos ámbitos idiomáticos, culturales y folclóricos. Si naturalmente sirven de apoyo a la representación lingüística, naturalmente también crean y recrean en muchas ocasiones la propia lengua.