VARIOS AUTORES
Con este libro nos hemos propuesto acercarnos al mundo de las almadrabas tomando como referencia tres conceptos: recursos naturales, paisajes y sociedades. La roturación de los espacios marismeños para la creación de salinas y la producción de sal debían, en principio, responder a la demanda generada en las almadrabas cada temporada de pesca. Este proceso se intensificó entre el último cuarto del siglo xv y las primeras décadas del xvi. El atún o la sal no solo fueron consumidos por una población siempre en aumento, sino que estos productos formaron parte de las actividades comerciales. La red de mercaderes interconectados instalados en este entorno dinamizaba las vías que discurrían desde el Mediterráneo al Atlántico y desde el Mar del Norte a Berbería. La conexión, por tanto, es evidente: de un recurso natural a su aprovechamiento por una sociedad, pasando, evidentemente, por la organización de un paisaje característico. El paisaje actual se parece muy poco al de finales del siglo xv. Las investigaciones geo-arqueológicas, los dibujos y grabados flamencos del siglo xvi, la cartografía existente desde finales del siglo xvii, las descripciones de los cronistas locales o la documentación de archivo, han sido claves para reconstituir este espacio a partir de los Sistemas de Información Geográfica.