LAFON, MARIE-HÉLÈNE
«Comérselo.
Comérselo de memoria.
Comerse a Flaubert de memoria.
A tragos cortos. Sólidos. A chorros.
Un puñado de chorros tozudos,
unas zarzas.
Asestarlo.Soltarlo. A los amigos.
A los amantes. A los alumnos. A loslectores.
Que ya no pueden pero.
Recitarlo pordentro mudamente
para nosotros cuando no dormimos,
cuando flotamos en el metro, cuando
andamos por lacalle. Recitarlo para la
paz y para la alegría.»