KARPOV, ANATOLY
Karpov es un jugador práctico, se ocupa principalmente de los resultados. Su interés primordial es ganar; los factores artísticos tienen para él una importancia totalmente secundaria.
Karpov prefiere posiciones claras, comprensibles estratégicamente. En tales posiciones puede usar su juicio posicional para diseñar el curso de la partida. Este enfoque ahorra tiempo y energía, y contribuye a la excelencia general de sus resultados competitivos. En pocas ocasiones cae en apuros de tiempo.
¿Quieres saber cómo evitar los apuros de tiempo?
Karpov aborrece las tácticas complejas. No suele entrar voluntariamente en complicaciones salvo que tenga muy claro que la variante en cuestión es favorable para él.
Karpov jugando al ajedrez con negras Karpov valora la iniciativa por encima de la ganancia de material. Prefiere mantener la presión posicional en lugar de ir a por la ventaja de material. Probablemente sea uno de los grandes maestros menos materialistas de la historia. Su lema podría ser: primero la posición y luego el material.
Karpov utiliza todas sus piezas, incluyendo el rey, en el medio juego. Después de Steinitz, es el segundo jugador con el rey más activo de todos los maestros.
Karpov prefiere un final superior a un medio juego superior. Como jugador eminentemente pragmático, se interesa por los mejores resultados globales. Él sabe que aunque sus posibilidades de ganar en los finales superiores son equivalentes a los de lo medios-juegos superiores, las posibilidades de perder son prácticamente inexistentes. Mucho que ganar + poco que perder es, tradicionalmente, el enfoque de Karpov. En el siguiente vídeo te muestro la perfecta técnica de Karpov en los finales. ¡Impresionante!